Entendiendo el pie neutro

pie normal

Según el cuestionario StepStrong Foot Quiz, se determinó que usted tiene un tipo de pie neutral.

Dado que nuestros pies son la base de la alineación y función de nuestro cuerpo, tener un pie neutral no significa que esté libre de estrés o fatiga en los pies. Nuestros pies se estresan con cada paso que damos y, por lo tanto, requieren movilización y fortalecimiento diarios para reducir el riesgo de lesiones.

Antes de empezar a celebrar por tener un pie neutro, todavía debemos implementar hábitos diarios para tener pies y movimientos saludables.

Tenemos algunos consejos fantásticos que le ayudarán a mantener sus pies fuertes, móviles y sensibles sensorialmente.

Consejo nº1: la estimulación sensorial aumenta la conciencia de los pies

Para tener pies fuertes es necesario comenzar con la conciencia de los pies. ¿Sientes tus pies? ¿Conoce su distribución de presión?

Integrar al menos 30 minutos diarios de estimulación descalzo es una excelente manera de mejorar la conciencia y la fuerza de los pies.

Mejora tu nivel caminando sobre diferentes superficies, como exteriores, baños de piedras o incluso alfombras texturizadas.

Consejo #2: La liberación diaria del pie puede proporcionar un gran alivio

Liberar los pies durante al menos 5 minutos es una excelente manera de liberar tensión y estrés de los pequeños músculos de los pies. Pararse sobre una pelota de golf o de lacrosse puede aportar un masaje a los músculos.

Pero no te detengas ahí. Incorpora una simple liberación del pie al comienzo del día o antes de hacer ejercicio.

Consejo #3 – El pie corto es un ejercicio de pie ideal

Al igual que cualquier otro grupo de músculos de nuestro cuerpo, los músculos de los pies necesitan fortalecerse y ejercitarse. Uno de los mejores ejercicios para fortalecer los pies se llama pie corto.

Los ejercicios cortos para los pies se realizan mediante la acción de empujar los dedos de los pies hacia el suelo. La acción de empujar los dedos de los pies hacia abajo se puede experimentar inclinándose hacia adelante.

Comience parándose erguido con los pies separados a la altura de los hombros. Manteniendo el cuerpo rígido, comience a inclinarse hacia adelante. A medida que te inclinas hacia adelante, debes sentir los dedos de los pies empujando hacia el suelo. Mantenga la contracción de los dedos de los pies empujando hacia abajo, pero levante el cuerpo para volver a estar derecho.

Una vez que comprenda la acción de empujar los dedos de los pies hacia abajo, podrá hacerlo a lo largo del día. Ya sea que estés en cuclillas en el gimnasio o haciendo la postura del árbol en yoga, empuja los dedos de los pies hacia abajo para activar los músculos del pie.

Consejo #4 – El entrenamiento del equilibrio es funcional para nuestros pies

Una de las posiciones más funcionales en las que podemos entrenar nuestros pies y nuestro cuerpo es sobre una sola pierna. Con cada paso que damos, hacemos la transición al equilibrio sobre una pierna. A medida que envejecemos, comenzamos a perder la capacidad de mantener el equilibrio y hacemos la transición a una pierna. Esto puede ralentizar y cambiar enormemente la forma en que caminamos.

Incorpore el equilibrio con una sola pierna cuando esté en casa, en el gimnasio o si trabaja en un escritorio de pie. Mejora tu entrenamiento de equilibrio haciéndolo descalzo, sobre tu trípode y empujando los dedos de los pies hacia el suelo.